Transplantan con éxito el corazón de un cerdo a un humano
Cirujanos estadounidenses trasplantaron el viernes pasado el corazón de un cerdo genéticamente modificado en un paciente humano de 57 años. El procedimiento duró ocho horas.
Todo inició cuando las opciones para David Bennett, se habían agotado, el Centro Médico de la Universidad de Maryland decidió realizar el procedimiento extraordinario por “razones compasivas”.
Bennett quien a tres días de la intervención evoluciona favorablemente sabía que no había garantía alguna de que la cirugía experimental funcionaría. Según el comunicado de la Universidad de Maryland, un día antes de ser operado declaró “Era morir o hacer este trasplante. Quería vivir. Sabía que había pocas posibilidades pero era mi última opción”.
UMMC performs first-of-its-kind surgery successfully transplanting a genetically-modified pig heart to terminal heart disease patient. Learn more: https://t.co/2LfCe9Nc4k pic.twitter.com/ycgKYSYtWm
— Univ. of Maryland Medical Center (@UMMC) January 10, 2022
Desde el Centro Médico de la Universidad de Maryland señalaron que la operación demostró que el corazón de un animal genéticamente modificado puede funcionar en el cuerpo humano sin que se presente un rechazo inmediato. Aunque todavía es muy pronto para saber si finalmente el proceso será totalmente exitoso. “Si funciona, entonces habrá un suministro inagotable de estos órganos para pacientes que sufren”, dijo el doctor Muhammad Mohiuddin, director científico del programa de la universidad.
“Ha sido una cirugía revolucionaria y nos acerca un paso más a la solución de la crisis de escasez de órganos. No hay suficientes corazones humanos de donantes disponibles para cumplir con la larga lista de receptores potenciales”, dijo Bartley Griffith, doctor encargado de esta intervención quirúrgica.
Para el procedimiento los galenos utilizaron el corazón de un cerdo que fue sometido a edición genómica para retirarle un azúcar de las células responsables del rechazo casi inmediato de órganos. En la edición también se insertaron genes que los científicos creen pueden facilitar la aceptación del órgano.